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miércoles, 22 de mayo de 2019

Mareas

Mucho antes de que nuestro planeta empezase a enfriar y a solidificarse la corteza, recibió el impacto de otro cuerpo del tamaño de Marte.

Este acontecimiento lanzó material al espacio, formando un disco alrededor de nuestro planeta. Ese material se fue atrayendo entre sí, fusionándose y dando origen a nuestro satélite, compañero inseparable en nuestro viaje cósmico: la Luna.

La fuerza de la gravedad crearía un vínculo inseparable con nuestro nuevo satélite.

Esa misma fuerza es capaz de atraer el agua hacia la Luna, sobre todo cuando se le suma la gravedad del Sol en sus fases nueva y llena. Y si es atraída por un lado, disminuye en el opuesto, creando así las rítmicas mareas.

Cuando se alinean Sol y Luna se producen las mareas vivas y cuando se encuentran en ángulo recto se producen las mareas muertas.




De esta forma, denominamos pleamar a la altura máxima que alcanza una marea y bajamar a la más baja. La diferencia entre una y otra se denomina amplitud de marea. Esta amplitud es máxima en las mareas vivas y mínima en las muertas.


Esquema: V. Aparici
Aquí os dejo un ejemplo de marea en el puerto de Cancale (en el atlántico francés) con dos fotos con una diferencia de hora y media, donde se aprecia la subida la de marea.


Fotos: V. Aparici

En el mediterráneo hay mareas que en algunas zonas se perciben mejor que en otras. En nuestra zona son tan sutiles que la mayoría de las veces el oleaje las enmascara. Si no me creéis (y hacéis bien) os adjunto las tablas de marea para el puerto de Castellón para que comprobéis los impresionantes 10 cm que separan la pleamar de la bajamar.


Texto corregido y revisado por laerrataquemata.com

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